En cuanto a movimientos, el ecologista nace de una necesidad llevadera de preservar el medio ambiente, ya que, con el paso del tiempo se va notando la huella humana tanto en materia de recursos, como en ingerencia en el medio común mediante residuos. Se trata de un movimiento que cada vez va ganando más adeptos y cuan mayor punto de fisura se encuentra en lo complicado de ganar un pequeño avance a favor vs lo fácil que contamina la humanidad consumiendo sin moderación. Cada día hay personas esforzándose por mantener sin basura las playas, o las calles. Lamentablemente, además de que la basura debe si o si llegar a parar a algún lugar (ocupando un espacio en la tierra) en porcentaje, son muchas más las personas que ignoran el daño que hacen primeramente al consumir y segundamente en el lugar que arrojan sus restos, siendo incluso lugares llenos de naturaleza en casos en que no tienen costumbres ecologistas o de convivencia en comunidad.