Estudiantes, Fotografía19 octubre, 2018<19 octubre, 2018

Una semana con cámara en mano

by Escuela de Periodismo UACh

La fotografía número tres la tome en la farmacia Pratt frente a la plaza de la república, una de las farmacias más antiguas de Valdivia, que en un costado de la tienda posee un mostrador con artículos antiguos que se vendían en el local. Me llamo la atención esta parte porque pese a visitar muchas veces aquella farmacia nunca había mirado esa parte con tanta detención como al momento de tomar la fotografía.

Hoy trabajo para una empresa que realiza coffes saludables, garzonear es mi trabajo paralelo a los estudios desde que tengo 15 años.

Esta foto fue tomado en un reporteo, sin embargo, tome otra con mi cámara que en realidad salió mucho mejor.

Aquí hay un gran ejemplo de que a veces, la dedicación que se le da a una fotografía es muy importante, asi se logra transmitir algo.

Los números de la foto pertenecen a la dirección de mi casa, a lo largo de mi vida he vivido en muchas casas, anteriormente vivía en una numerada 1313. El número de mi casa anterior era muy chistoso para mis amigos por la referencia coqueta que este tenía, me arrepiento de no haber sacado una foto como está a mi casa anterior.

El libro de José Luis Martínez Albertos, mi propósito es leerlo antes de fin de año. Muy buena recomendación del profe Inzunza, apuesto que él ni se imagina que tengo este libro.

Siempre que estoy en lugares muy antiguos pienso en todas las personas que a través de los años han estado parados en el mismo lugar que yo, pensé en cuantas personas han pasado por la plaza, cuantas personas tuvieron los pies en el mismo lugar.

Fui al mercado en busca de unos premios para los juegos que se realizan en la fonda de mi familia –una fonda familiar-. Los imanes mapuches me recordaron a mi pololo, porque eran unos pequeñitos muy lindos que representaban un sentimiento muy grande para él y me recordó las mil conversaciones que tenemos en torno a la cosmovisión mapuche. Que loco como algo tan pequeño y tierno me recuerde algo tan profundo.

En la mañana dijo que podíamos utilizar fotos con nuestros pololos, él vive lejos y nos vemos solo el fin de semana, así que subí la foto de algunas fotos en blanco y negro que tenía guardadas.

Tengo dos mascotas en la casa y siempre en algún momento del día comparto con los dos, sobre todo el perro que no conoce el espacio personal.

Kai es el integrante más pequeño de la familia, mi hermano lo adopto cuando solo tenía 3 meses.

Mi gato, a diferencia de otros gatos, es muy tierno y juguetón. Siempre atento a quien llega y quien se va.

Solo le puedo tomar fotos desprevenido, ya que al más mínimo movimiento él se acerca rápidamente para recibir cariño.

Tan bellos los cisnes y típicos de Valdivia, creo que me gustan más que los lobos marinos y no lo digo solo por la estética.

Una de mis canciones favoritas de la vida se llama “encanto tropical”, creo que esta foto la saque pensando en ella.

Mi papá fumando, creo que esta imagen de mi papá y su cigarro trasciende cualquier casa, cualquier patio, cualquier cigarro. Es que mi papá fuma desde que lo conozco.

Hay carteles que alegran hasta las almas en pena, ¿qué mejor que un selladito y un café?

Definitivamente este brownie es mejor que un selladito, a veces uno se puede dar ciertos lujos.

Siguiendo en la línea de la comida, pese a lo deliciosas que se ven las papas, lo que más disfrute ese día fue la compañía. Mi madrina bella que siempre se raja con algo rico.

Son fans de Valdivia y sus calles, sobre todo esos días de sol con frio, cuando el cielo esta azul pero el viento te rompe la cara.

Increíble como semejante construcción cabe en una foto. Dato: nunca he jugado en el casino.

Ojala los perritos que cruzan el puente de un lado a otro, pudieran leer este cartel. ¡POR SU SEGURIDAD!

Este mural está en la esquina de mi casa y siempre me gustó mucho. Sin embargo, nunca tome una foto antes para inmortalizarlo. (Cada cierto tiempo vuelven a pintar).

Quiero con mi alma que comience una primavera decente en Valdivia, con solcito y flores.

Lejos este es el mejor momento del día, cuando abro la puerta y llego a mi casa. Ver a mis papás, mis hermanos y mis mascotas es un privilegio del que muchas veces me olvido.

Tengo guitarra desde los 15 y nunca he podido tocar una canción entera.

Mi fiel compañero de los días de frio intenso, donde la boca se hace pedazos y duele reír, y yo me rio mucho.

Mi mamá se maquillaba para salir, me encanta ver cuando la gente se maquilla y ella sobre todo se pone nerviosa y cada 5 segundos pregunta si algo está mal.

La primera navidad que pase con mi pololo, él me regalo estos dos muñequitos ya que para él en navidad se regalan juguetes, independiente de la edad que tengas. (Yo le regale un autito de Mario Kart).

Mi hermano lo recibió como regalo de cumpleaños y lo dejamos en el comedor, desde ese momento todas las tareas de la casa (lavar loza, poner la mesa, ir a comprar, cocinar) se sortean con los dardos.

Siempre me lo repito, tengo que leer más, ¡TENGO QUE LEER MÀS! Es que leo muy poco.

Siempre hay una nueva partida en la vida y hay que estar listos para correrla, caminarla, disfrutarla, ¡vivirla!

La fotografía número tres la tome en la farmacia Pratt frente a la plaza de la república, una de las farmacias más antiguas de Valdivia, que en un costado de la tienda posee un mostrador con artículos antiguos que se vendían en el local. Me llamo la atención esta parte porque pese a visitar muchas veces aquella farmacia nunca había mirado esa parte con tanta detención como al momento de tomar la fotografía.

Hoy trabajo para una empresa que realiza coffes saludables, garzonear es mi trabajo paralelo a los estudios desde que tengo 15 años.

Esta foto fue tomado en un reporteo, sin embargo, tome otra con mi cámara que en realidad salió mucho mejor.

Aquí hay un gran ejemplo de que a veces, la dedicación que se le da a una fotografía es muy importante, asi se logra transmitir algo.

Los números de la foto pertenecen a la dirección de mi casa, a lo largo de mi vida he vivido en muchas casas, anteriormente vivía en una numerada 1313. El número de mi casa anterior era muy chistoso para mis amigos por la referencia coqueta que este tenía, me arrepiento de no haber sacado una foto como está a mi casa anterior.

El libro de José Luis Martínez Albertos, mi propósito es leerlo antes de fin de año. Muy buena recomendación del profe Inzunza, apuesto que él ni se imagina que tengo este libro.

Siempre que estoy en lugares muy antiguos pienso en todas las personas que a través de los años han estado parados en el mismo lugar que yo, pensé en cuantas personas han pasado por la plaza, cuantas personas tuvieron los pies en el mismo lugar.

Fui al mercado en busca de unos premios para los juegos que se realizan en la fonda de mi familia –una fonda familiar-. Los imanes mapuches me recordaron a mi pololo, porque eran unos pequeñitos muy lindos que representaban un sentimiento muy grande para él y me recordó las mil conversaciones que tenemos en torno a la cosmovisión mapuche. Que loco como algo tan pequeño y tierno me recuerde algo tan profundo.

En la mañana dijo que podíamos utilizar fotos con nuestros pololos, él vive lejos y nos vemos solo el fin de semana, así que subí la foto de algunas fotos en blanco y negro que tenía guardadas.

Tengo dos mascotas en la casa y siempre en algún momento del día comparto con los dos, sobre todo el perro que no conoce el espacio personal.

Kai es el integrante más pequeño de la familia, mi hermano lo adopto cuando solo tenía 3 meses.

Mi gato, a diferencia de otros gatos, es muy tierno y juguetón. Siempre atento a quien llega y quien se va.

Solo le puedo tomar fotos desprevenido, ya que al más mínimo movimiento él se acerca rápidamente para recibir cariño.

Tan bellos los cisnes y típicos de Valdivia, creo que me gustan más que los lobos marinos y no lo digo solo por la estética.

Una de mis canciones favoritas de la vida se llama “encanto tropical”, creo que esta foto la saque pensando en ella.

Mi papá fumando, creo que esta imagen de mi papá y su cigarro trasciende cualquier casa, cualquier patio, cualquier cigarro. Es que mi papá fuma desde que lo conozco.

Hay carteles que alegran hasta las almas en pena, ¿qué mejor que un selladito y un café?

Definitivamente este brownie es mejor que un selladito, a veces uno se puede dar ciertos lujos.

Siguiendo en la línea de la comida, pese a lo deliciosas que se ven las papas, lo que más disfrute ese día fue la compañía. Mi madrina bella que siempre se raja con algo rico.

Son fans de Valdivia y sus calles, sobre todo esos días de sol con frio, cuando el cielo esta azul pero el viento te rompe la cara.

Increíble como semejante construcción cabe en una foto. Dato: nunca he jugado en el casino.

Ojala los perritos que cruzan el puente de un lado a otro, pudieran leer este cartel. ¡POR SU SEGURIDAD!

Este mural está en la esquina de mi casa y siempre me gustó mucho. Sin embargo, nunca tome una foto antes para inmortalizarlo. (Cada cierto tiempo vuelven a pintar).

Quiero con mi alma que comience una primavera decente en Valdivia, con solcito y flores.

Lejos este es el mejor momento del día, cuando abro la puerta y llego a mi casa. Ver a mis papás, mis hermanos y mis mascotas es un privilegio del que muchas veces me olvido.

Tengo guitarra desde los 15 y nunca he podido tocar una canción entera.

Mi fiel compañero de los días de frio intenso, donde la boca se hace pedazos y duele reír, y yo me rio mucho.

Mi mamá se maquillaba para salir, me encanta ver cuando la gente se maquilla y ella sobre todo se pone nerviosa y cada 5 segundos pregunta si algo está mal.

La primera navidad que pase con mi pololo, él me regalo estos dos muñequitos ya que para él en navidad se regalan juguetes, independiente de la edad que tengas. (Yo le regale un autito de Mario Kart).

Mi hermano lo recibió como regalo de cumpleaños y lo dejamos en el comedor, desde ese momento todas las tareas de la casa (lavar loza, poner la mesa, ir a comprar, cocinar) se sortean con los dardos.

Siempre me lo repito, tengo que leer más, ¡TENGO QUE LEER MÀS! Es que leo muy poco.

¿Qué es de la vida sin las amistades?

Esta soy yo, todos los días igual.

Siempre hay una nueva partida en la vida y hay que estar listos para correrla, caminarla, disfrutarla, ¡vivirla!

Esta pequeña selección fotográfica muestra cómo se desarrollan mis días, entre amigos, comida, paisajes y percepciones. Tomar conciencia de lo que se fotografía, entrega una nueva visión de lo que te rodea. Cambia tu forma de ver la rutina, ya que al final, a través de la cámara todo se vuelve una nueva experiencia.