Carolina Müller, mi reacción al ver estos videos fue similar a la tuya, me sorprende como nuestro cerebro puede ser engañado de tal manera en que nos haga desconfiar de nuestros propios sentidos, y también, fuera de este tipo de juegos mentales, la percepción de las cosas también varía entre cada persona, por lo que la percepción va más allá de solo nuestros sentidos e instintos, sino que también hay otros factores importantes que la afecten, así que de ahora en adelante no podré confiar y “creer en lo que vea”.